• Capitulo O6

-Narras tú-

El camino fue bastante incomodo, los dos no emitíamos ni una sola palabra.
Mirando el perfil de Justin disimuladamente apreciaba totalmente la belleza que encarnaba toda su piel, contando cada uno de sus lunares que postraban en sus alrededores. Joder era tan guapo, pero me daba cosa mirarlo así. Estaba algo golpeado por la paliza que le dio el baboso de Cesar. Su nariz sangraba un poco, y la comisura de su boca reventado.

-¿Que miras? –El me miro pronto y rápido volver en enfocar su mirada en el camino.
-Nada. –Respondí mirando a la ventana y mis mejillas se encendieron. Pronto Justin de nuevo rompió el silencio.
-¿A dónde te llevo? –Este contexto sin mirarme.
- Delancey Street 751… por favor. –Conteste sin decir una palabra más. –Justin condujo hacia mi dirección. Daba vuelta tras vuelta, manejaba algo rápido pero no me alarmo. Bajo la ventana a tope y recargo su brazo izquierdo mientras su mano derecha tomaba el volante y cambiaba manos para meter velocidad. Se nota que nunca he entrado en su auto y verlo manejar. Se veía jodidamente sexy.
-Que tengo ¿eh?
-¿Qué?... ¿de qué hablas?
-No paras de mirarme.
–No…Claro que no. –Mis mejillas se enrojecieron intentaba jugar con mis dedos.
El se rio leve.
-¿De qué te ríes? –Pregunte con un tono risueño. –
-Nada nena, nada. –Me quede con seguir la conversación pero no sabía que mas decir. Parecía que él quería decir algo más. Pero justo llegamos afuera de mi casa.

Nos quedamos unos segundos dentro de la camioneta y Justin se atrevió a decir las primeras palabras.
-Y… ¿Estás bien? ¿No te lastimo ese idiota? –Pregunto sin mirarme aun.
-Sí, estoy bien. – Conteste mientras abrí la puerta de la camioneta y salir – No pude quedarme más dentro sentía nervios, y mis mejillas estaban sonrojadas creo que era primera vez que hablaba supuestamente una conversación con Justin… Justin salió y se acerco a mí. No me atreví a mirarlo a la cara.
-Fuiste muy valiente, muchas gracias. –Dije con la cabeza abajo. Pero al parecer el no dijo nada.
-Gracias, nos vemos mañana. –Conteste mientras me alejaba para entrar a mi casa.
-Espera… –Este contesto. Mientras yo me detuve dándole la espalda.
-¿Si? –Respondí. –Deseosa de que fuera a decirme algo, pero tratando de mostrarme seria.
-No… nada. –Contesto. –Cerré mis ojos, joder… pensé que me diría algo más. Seguí mi camino Asia mi casa. Como quisiera que me detuviera y poder…
El me jalo con el brazo delicadamente apegándome a su camioneta. Ya no podía salir de sus brazos. Ahora el me detenía atrapada junto a él. Nos quedamos mirando por 10 segundos. Aquellos segundos parecían eternos, estaba algo nerviosa. Me miraba tan profundo, como si jamás en la vida me ha mirado el así de esta manera. Sus labios mojados que percibía el olor de aquella boca húmeda, que me daba impulso de querer besárselos ya mismo. El al parecer también quería probar los míos. Que hago, que hago, este momento era único. Solo los dos, los dos juntos, como si estuviéramos en una película. Que cualquier espectador se le diera el lujo de exigir “bésalo, bésalo”. Pero mi mente se invadió.
Aquellos recuerdos de dolor, de esa ignorancia cuando lo salude y el solo siguió su camino. Aquello me dolía. Algo que nadie puede comprenderlo hasta que estén en mis zapatos.

El se inclino para besarme y solo me voltee mi cabeza rechazando aquel beso. Por más que quisiera besarlo él y yo no somos nada. No le daré el gusto de un rato nada más. No sabía que más pensar, que decir. Se veía muy lastimada su carita, quizás curándosela, es lo mínimo que puedo hacer para agradecer de haberme quitado de encima del estúpido de cesar.

-Te ves muy mal, si quieres… pasemos a mi casa, tengo un botiquín de primero auxilios. Te hará bien.
El se quedo pensando unos momentos y luego Asintió moviendo su cabeza.

Abrí la puerta de mi casa. Con suerte que mi papá había salido a cenar. Me parece que llegara mas tarde.
Busque mi botiquín y lo puse en la mesa. De repente se apagaron todas las luces.
-Joder se fue la luz. Me permites, iré a prender unas velas. –Me levante y busque y busque velas y no encontraba, solo las de mi habitación perfumadas. Bueno al menos olerá bien toda la sala de estar.
Prendí dos, tres, hasta diez velas. Ahora más bien parecía como si fuera una noche romántica. Reí ante ello.

Abrí el botiquín y tome curitas, algodón, alcohol, agua oxigenada y todo para poder curar a Justin.

-Serás mi enfermera. –Contesto Justin sonriendo.
-A ha, –Reí. –
El se sentó en el sillón en lo que me miraba todo lo que hacía.
-¿Como sabes todas estas cosas? –Pregunto mientras ponía agua oxigenada en un algodón.
-¿Digamos que toda chica debe saber de primero auxilios, tú no sabes? –Conteste mientras me acercaba a él para revisar los moretones y cortadas que tenían justo en su ojo y en su labio.
-Naa… cuando me pasa esto solo limpio la sangre y lo dejo así.
-A sí que no es la primera vez que te casi te matas con alguien. –Esperando en recibir una respuesta de parte de él, ignoro mis palabras.

Tome el mentón de Justin y empecé a dar pocos espasmos tan suaves para poder limpiar los restos de sangre que cubrían sus cortadas.
Escuche pequeños gemidos de parte de Justin como si se quejara del dolor.
-¿Te duele? –Conteste mirándole a los ojos
-Naa… –Respondió cerrando los ojos. – Se que si le dolía, quería disimular que es fuerte.
-Entonces eres bueno aguantando. ¬–Le dedique una pequeña sonrisa. – Mientras ponía un curita en sus cortadas.
-Tú también serias buena en otra cosa. –El rio entre dientes. –
-¿Jaja, quien yo? –Pregunte con un tono sarcástico, ya sé a lo que se refería este tonto. Reí a mis adentros.
Coloque un poco de pomada por encima de su golpe hinchado que parecía pulsar de dolor. El cerraba los ojos y los abría de nuevo.
-Si tú – Asintió con la cabeza mientras pronunciaba las palabras
-a si… como en que haber.
-¡No, no te diré! –El se aparto. –
-¡Vamos dime Justin que es! – Sabia perfectamente a lo que se refería pero quería escucharlo de él mismo.
–Pronto Justin me quedo mirando a los ojos mientras curaba su cara, me miraba más, profundo, como si estuviera anonadado. Joder otra vez nuestros labios querían juntarse. Pero los míos no lo permitían por más que muera probarlos, no querían. Mis mejillas se encendieron mejor cambiando de tema.
-¿Te puedo preguntar algo? –Dije aun cercas en frente de él.
-¿Hmm?. –Me quede pensando en lo que le diré. –
-¿Por qué me defendiste de Cesar? Sabes, fue muy lindo de tu parte que hicieras esto por mí.
-No es nada. Solo que vi como ese tipo se estaba y quería aprovecharse de ti. No iba permitir que se sobrepasara.
-¿Pero… tu como te diste cuenta que se estaba aprovechando? Si yo estaba en el otro lado del patio. ¿Ósea que… estuviste… tu sabes… vigilándome?
-Por supuesto que no _______, solo quería hacer algo bueno por una vez aunque sea. No es nada. Solo agradécelo y ya. –El levanto la voz. –
-Te lo agradezco muchísimo. Fue muy lindo eso que has hecho por mí. Pero, nunca pensé que eso vendría de parte de ti. Es como si de verdad importara para ti.

No debía preguntarle nada, como siempre arruinaba todo, bueno al parecer no conozco mucho el carácter de Justin, no sé como reaccionara a cada pregunta tonta que haga.

-Joder niña, no es que me importes. Es solo que no se… ¿olvídalo si?
-¡No! Solo dime, no creo que se te haya pasado por tu mente así como así por mí.
Digo, no a cualquier chica estarías dispuesto ayudarla.

-Mira perra no tengo por qué darte explicaciones sí. –Mis ojos se pusieron como platos al escuchar su trato conmigo de esa manera.
-Justin… –El tomo su chaqueta se la puso y se dirigió hacia la salida. –Estúpida, estúpida, la cague. Si la cague.

-Está bien haz lo que quieras, si deseas irte hazlo, no te voy a detener. –Cruce mis brazos en mi regazo. – El me miro unos segundos con sus ojos entrecerrados y sus pómulos endurecidos. Giro la manija de la puerta antes de cerrarla y salir de ella.
Escuchando como encendía el motor de su camioneta, me di media vuelta apoyando mi espalda en la puerta y deslazándome en ella hasta que mi cuerpo toco el suelo. Mientras juntaba mis piernas y las abrazaba, posando mi frente en mis rodillas.


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Al día siguiente fue otros días comunes como los de siempre. Llegue al salón y casi no habían tantos compañeros. Los del grupito “nerds” de la esquina del salón y yo.

Hasta que pronto note que Justin se aproximaba a la entrada del aula. Note de reojo que Justin detenía su mochila morada en su butaca, no me atreví a mirar. Captaba de reojo tampoco se notaba que me miraba. Se sentó en su lugar y yo solo decidí acostarme en mi butaca reposando mis brazos y cabeza en mi bolsa mirando para otro lado.

Este silencio era incomodo, que ninguno de los dos se acercaba para haber quien a quien le hablaba primero. Después de lo que paso ayer. Se me encendían las mejillas de solo recordar de nuevo esto. Creo que no era para tanto, pero fue lindo todo lo de ayer. Se me formaba una gran sonrisa estúpida.

Alguien me toco por atrás, abrí mis ojos. ¿Shit y si es Justin? Me levante y mire.
Era Amber, Amber Jonhson. Era otra de mis amigas con las que me juntaba, al parecer no se juntaba conmigo y Nicole, pero me caía súper bien siempre le contaba a veces mis cosas como cuando lo hago con Nicole, y le confió por que se que nunca dice nada.

-Hola, me asustaste. –Reí con un hilo de voz.
-Que haces, ¿estás bien? Te notas como… triste. –Amber torció los labios.
-Sí, estoy bien, es solo que tengo sueño. –Mentí. –En ese rato va llegando Nicole.

-¡Amigaaaaa…! –Dijo Nicole extendiendo sus brazos. Le ofrecí un abrazo.
-Tonta, ayer me contaron que te fuiste por un problema, y al parecer que te fuiste con el tal Bieber…. ¿eh? –Susurro al mencionar su apellido. –

- ¡Dios! Mujer tienes que contármelo todo, todo, todo, con lujo de detalles. – Ella respondió emocionada.
-Siiiiiiiii, claro que si todo, todo, no sabes lo que paso… y ¿por cierto dónde estabas? Ayer trate de…
-Si, a eso voy. –Nicole me interrumpió. –
-Ayer te estaba buscando, pero me dijeron que te habías ido. Te quería llamar pero recordé con quien estabas y decidí no molestar y esperar a hablarlo mejor personalmente Ja, ja, ja. –Ambas reímos. –
-¡Y adivina ahora de quien soy novia! –Nicole susurro totalmente emocionada. –
-No me imagino.
-Ryan, Ryan Bu-tler. Mis ojos se pusieron como platos al recibir aquella noticia. Me espante, porque Ryan es súper, súper amigazo de Justin.
-¿Ryan? Amiga, no se pero sabes él es el amigo de Justin, y tu sabes que dices que Justin es todo un cabron. Tengo miedo que él sea igual.
-No, _______ con el todo es diferente, es muy lindo. Nunca pensé que entre Ryan y yo habría algo más que una simple amistad, Me gusta, me encanta, y sé que el también lo siente.
-Si él te hace feliz Nicole, yo también lo estaré pero dime, como es eso de que ya son novios, no se me vino por la mente para nada de que el te gustara. –Le dedique una sonrisa.
-Nunca te dije a miedo a que te espantaras, pero él se me hacia lindo, carismático, nunca lo trate ni nada. Pero ayer que estabas con Harry quise dejarlos solos. Solo empecé a Bailar y Ryan se acerco, al parecer nos gustamos por qué no dejaba de mirar ni dejábamos de bailar jaja me pareció lindo hasta que nos besamos. Fue algo increíble, jamás pensé que llegaríamos a tener una relación. El me trajo de vuelta a casa y ahí fue cuando se me declaro. Dios ______ no sé si ya es rápido pero siento que lo quiero. Esta mañana me mando un mensaje deseándome bonita mañana.

-Waoo… Nicole, de verdad que te escucho súper contenta con Ryan a lo mejor y el es otra persona diferente. Ojala el sea el correcto para ti y valga la pena ¿eh? Yo tampoco lo eh tratado pero como dicen nunca hay que juzgar a las personas. Y si él te hace feliz amiga, yo soy feliz. –Le sonreí entre dientes. –

-Ahora tu, cuéntamelo todoooo… –Nicole se puso atenta al escuchar todo lo que le contaba, cada y cada parte que pase con Justin, desde la pelea de ayer con cesar. Hasta el pequeñito drama que causo, al parecer el es un impulsivo. No se le puede decir nada que explota.

-No me puedo creer entonces que Justin te haya defendido del idiota de cesar, me impresiona enserio. ¿Sera que en realidad siente algo por ti? Y, ja, ja, ja, no me creo lo que pasaste con él, ¡Aparte Harry! Te dije que serias la que tenia mas miradas de toda la fiesta, ¿entonces me juras que Harry te beso? ______ dime tu secreto tienes a todos a tus pies–Ambas reímos.
-Jajaja caaalmate… Solo tuve mi día de suerte, o quizás fue tu vestido. –Ambas reímos. –
–Termine de contarle todo a Nicole, tal y con detalles como ella me pidió.
-Oye, y hablando de Harry, ¿lo has visto?, me quede preocupada sobre lo que me dijo ayer en la fiesta. –Conteste preocupada. –Su mama está en el hospital, espero el este bien y su mama igual. También me recordé de aquel beso que nos dimos y hoy tendría que darle la respuesta. No estoy segura no creo que con el funcione todo esto. Lo había olvidado por todo lo que paso con… Justin.
-Ni idea, no lo he visto, quizás su mamá si esta grave y por eso no vino.

Seguimos Nicole, Amber y yo conversando de todo lo que paso ayer. Se me hizo raro que, no haya llegado ni un maestro aun. Ya eran más de las 7 am.


-Jóvenes atención por favor. –Dijo un señor mientras entraba para dar al parecer unas indicaciones.
-Felicitaciones. Este grupo ha sido unos de los mejores promedios de toda la escuela. A sí que nos damos a ofrecer un gran premio que les encantara y beneficiara a todos. –Todos voltearon a mirarse preguntándose qué premio seria.

-El premio consiste en ir todo el grupo de campamento, a las cabañas “El bosque”. –Todo el grupo grito al recibir aquella padrísima noticia. –Continúo…–
Esto se llevara a cabo el día de pasado mañana, sábado. Partiremos hasta ese día con duración aproximadamente dos semanas en las cabañas, que se encuentra muy cercas de New York. Donde podrán obtener todo tipo de diversión. Tirolesa, Cuatrimotos, Terrazas, cabalgata… para los que quieran montar caballo, abra un grande lago, entre otras muchas cosas más. Las cabañas serán para seis personas: tres mujeres y tres hombres.

Cada cabaña contiene 3 recamaras, 2 yacusis, su cuarto para jugar billar, comida suficiente: despensa, y todo necesario para justamente dos semanas de gran descanso.
Cada cabaña tiene una piscina, ya que si no tienen frio pueden meterse a nadar. La gran ventaja es que es agua termal, y pueden disfrutar de un bello paisaje. Llevaran, ropa adecuada para el frio, ya que estaremos a más o menos a 5 grados. 10° Aproximadamente.
Aprovechen, esta oportunidad.

Pasare a cada uno de sus asientos para dejar un formulario donde podrán llenar todos sus datos. Y su nombre completo por favor. Y mañana mismo les daré los nombres de sus compañeros en la cabaña. A sí que desafortunamente, no podrán escoger a sus amigos para estar en la cabaña. Recuerden que serán: tres mujeres y tres hombres. Esto hará que se conozcan mejor entre todos y convivan más.

Llenen su formulario, (con sus datos completos) repito. –Genial, dios esto será súper grandioso. Parecía como si nos hubiéramos ganado el premio mayor de pasar vacaciones gratis. Creo que en estas dos semanas… no quiero ni pensar todo lo que me divertiré. Pero lástima que no podre estar junto a Nicole. Ya que no podre elegir a mis compañeros de campamento seria una suerte si me tocara con ella, aun así, todos mis compañeros del salón me caen súper bien excepto... bueno. Toda la bolita de Justin, y Ryan, que ahora era el nuevo novio de Nicole.

Llenare el formulario de Harry. No está, creo que se lo haré para que el también valla y no desperdicie la oportunidad. Al parecer todo el grupo estaba muy emocionado. ¡Joder ya quiero que sea sábado!

Salimos Nicole, yo y Amber ara sentarnos en las mesas de la cafetería ya que era hora del almuerzo.
Nos sentamos. Joder ahí está Ryan y Justin, justo al frente de nosotras.
-Nicole vallémonos de aquí. –Dije en susurros–
-Hay no amor, mira ahí viene Harry platiquen, se ve algo preocupado.
-Ven Amber vamos con Ryan y Justin para que ______ y Harry puedan platicar. –Nicole se levanto mientras jalaba del brazo a Amber con ella para sentarse con su novio Ryan, y Justin. –
Harry venia con un caminado lento, pensé que no vendría.
-¿Harry, estas bien? –Pregunte levantándome y regalarle un abrazo. –
-No, no _______. –Dijo mientras nos sentábamos en la banca.
-Joder, Harry como esta tu mamá.
-Mi mama… bueno ella está muy grave. –Dijo agachando la cabeza. –
-¡No, no pero que paso cuéntame que tiene! –Conteste mientras me acercaba mucho a él para darle un abrazo, quizás podría ayudarle hacerlo sentir mejor.
-Cuando recibí el mensaje ayer en la fiesta, pensé que no era algo tan malo, quizás para no asustarme. Mi mama se cayó de las escaleras y se descalabro. Ya te imaginas cuando llegue estaba la ambulancia, y… a la madre, me dolió como no tienes idea, vi sangre en ella, en su cabecita, por todo el piso. Mi mama ahora está en terapia intensiva. Nadie la puede ver aun. Esta inconsciente. Pero estable. No despierta aun. –Harry contesto mientras derramaba una lágrima. Tome a Harry su carita y le di un pequeño beso en su nariz, luego en su mejilla. Y lo abrace completamente. En ese momento voltee al frente, vi a Ryan y Nicole besándose y Justin parecía hablar con Amber, ellos dos me miraban como si hablaran de mi. Trate de no tomar importancia.
Oh… Harry, mira, no te preocupes. Me duele mucho verte así, y saber que tú mama esta enfermita. Todo saldrá bien, te lo juro. Solo tranquilo, tranquilo. Reza y ten fé en que tu mamá podrá despertar. Se pondrá bien si, pero ya no llores. –Conteste mientras limpie sus lágrimas. Le di otro beso en la mejilla.
-Gracias ______ de verdad que contigo hace que me sienta un poco mejor… –Dijo mientras miraba hacia con ¿Justin? Mierda, ¿Nicole y Ryan? Y ¿Amber? Ahora ellos no estaban. Estaba Justin solo, solo y con… Deborah. Trate de disimular que no veía, pero miraba todo, todo, de reojo.
-¿Harry?, ¿puedes ir un momento a la sala de maestros? Te ocupa alguien. –Dijo alguien mientras se acercaba a él.
-Sí, ahora mismo voy. –El se levanto. –
-Mmmm… _______, ¿en un rato mas vuelvo si? –Me dio un beso en mi mejilla. –
-Si claro. –Respondí. En lo que miraba al frente, justo al frente de mi, estaba Justin y Deborah. Besándose. ¡Besándose! Si leíste hasta acá, presiona en twittear. Twittear